Se acerca la Navidad, un tiempo muy especial para los niños y niñas, un tiempo para disfrutar en familia del tiempo libre.
Por esta razón hoy os hemos preparado este decálogo de ideas para disfrutar de unas vacaciones de Navidad en familia impregnadas de valores. Porque los niños y niñas se merecen una Navidad llena de magia, sueños, ilusiones, solidaridad, momentos compartidos… así como también se merecen que les sigamos educando en valores.
¿Tenemos un gran reto, no? ¡Allá vamos!
1. Pasar tiempo en familia
Aprovechemos las vacaciones para hacer salidas en familia: excursiones en familia al aire libre, ir a la nieve, pasar unos días en una casa de colonias en plena naturaleza, visitar un belén viviente, un mercado de Navidad, una exposición, ir al teatro o al cine,…
Aprovechemos también para hacer actividades en casa en familia: ya nos entrenamos mucho durante el confinamiento… pode podemos seguir haciendo manualidades, juegos de mesa, explicando historias y cuentos, cantando, bailando, cocinando juntos… divirtiéndonos en familia.
Cualquier excusa es buena para pasar un rato en familia y fortaleces los vínculos afectivos. Estos ratos nutrirán a los niños y niñas a nivel emocional y les aportarán muchos beneficios para su autoestima y desarrollo psicosocial.
2. Disfrutar de la naturaleza invernal
El invierno es un tiempo fantástico para disfrutar de la naturaleza, tanto si vamos a la nieve como al bosque, paseamos por un parque urbano cerda de casa o vamos de excursión a un Parque Natural. Y cuando estemos en un entorno natural… no olvidemos de jugar con nuestros hijos e hijas: 8 juegos de exterior para jugar en familia.
También podemos disfrutar, sencillamente, de la experiencia sensorial y emocional que nos aporta un paseo por la naturaleza: el sonido de las hojas secas bajo las botas, ver cómo sale el aire caliente por la boca cuando respiramos, tocar el agua helada de un río, escuchar el canto de los pájaros del bosque y ver cómo saltan de rama en rama, descubrir paisajes nevados, ver una ardilla, seguir pisadas de animales, hacer fotos a plantas y setas, poner un pie en la nieve…
3. Escoger un casal de Navidad educativo
A menudo los adultos/as no tenemos los mismos días de vacaciones que nuestros hijos e hijas… y tenemos que hacer mil peripecias para conciliar la vida laboral y familiar. Podemos apuntar a los niños/as en algún casal de Navidad educativo para resolver esta situación: los niños y niñas disfrutan de un tiempo libre educativo donde fortalecen sus valores y su socialización, entre otros.
4. Apostar por el consumo responsable
En Navidad parece que todo el mundo tiene tendencia a dejarse llevar por la publicidad, que asocia de manera engañosa la felicidad con el consumo desmesurado. Pero la Navidad, más que nunca, tenemos que favorecer el consumo responsable y consciente. ¿Y esto cómo lo hacemos?
- En primer lugar, reflexionando sobre la necesidad que tenemos de los productos que adquirimos
- Ajustando la cantidad de alimentos y bebidas y favoreciendo la calidad y proximidad
- Comprando productos de comercio justo siempre que podamos
- Regalar experiencias en vez de objetos, por ejemplo… ¿qué tal si regalas un vale regalo para un fin de semana en familia en una casa de colonias?
- Mesurando la cantidad de regalos y juguetes que compramos y dando los juguetes que ya no se usan para que alguien los reutilice, evitando así la acumulación
- Buscar regalos de segunda mano para potenciar la reutilización
- Fabricar regalos en casa DIY, por ejemplo jabones y otros productos de cosmética natural con plantas medicinales
- Adquirir los regalos en tiendas de proximidad, favoreciendo la producción de proximidad y el tejido social
- Vigilar con los materiales de los productos: evitar los materiales plásticos y favorecer la madera y materiales naturales
- Controlando el gasto energético, sin abusar, por ejemplo, de la iluminación navideña y la calefacción
- Decorar la casa con decoraciones de papel, troncos, hojas o elementos naturales, o materiales reciclados: 4 decoraciones de Navidad con papiroflexia
Aquí tenéis una recopilación de ideas para favorecer el consumo responsable en casa con las recomendaciones de la Agencia Catalana de Consumo.
5. Escoger juegos y juguetes no sexistas ni violentos
¿Alguna vez nos hemos parado a analizar los mensajes subliminales que fan los juguetes a los niños y niñas? Si queremos hacer coeducación o educación por la igualdad de géneros, se debe ir con mucho cuidado con los juegos y juguetes que regalamos durante las fiestas.
Porque hay juguetes que fomentan actitudes violentas, discriminatorias y estereotipadas. Y los estereotipos que van absorbiendo a lo largo de la infancia los niños y niñas contribuirán a construir su personalidad y su identidad de género. Aquí os dejamos 5 reflexiones para escoger juguetes no sexistas ni violentos.
6. Favorecer la alimentación saludable y el deporte
Durante estos días de fiesta tenemos una gran oportunidad para educar los niños/as en la alimentación saludable, aunque parezca difícil durante la Navidad, es más fácil de lo que pensamos. Aquí tenéis nuestros consejos:
- Que los niños/as participen en ir a comprar los alimentos, potenciando siempre alimentos frescos de proximidad y ecológicos
- Potenciar el ejercicio físico, las excursiones al aire libre el deporte
- En las comidas festivas, intentar intercalar los platos más grasientos y proteicos con ensaladas
- Proponer fruta en los desayunos, meriendas y de postres, y hacer más ligeras las comidas no festivas a base de verduras y hortalizas de temporada
- Recordar a los niños y niñas que tienen que beber mucha agua y asegurarnos que tienen una botella o un grifo siempre cerca para que si tienen sed se puedan servir de forma autónoma
- Establecer unos límites claros respecto las chocolatinas y chucherías, haciendo que los niños y niñas se corresponsabilicen de su salud
- Buscar recetas saludables y divertidas y cocinar en familia:
7. Ser sostenible y respetar el medio ambiente
El consumo desmesurado de la Navidad tiene consecuencias nefastas para el medio ambiente. Aquí van algunas ideas para una Navidad más sostenible:
- Intentar usar siempre el transporte público
- Si vamos a un espacio natural, respetar siempre la naturaleza y las normas del espacio y no dejar basura.
- Controlar el consumo energético de casa: sin abusar de la calefacción y la secadora, y usando iluminación led y aparatos de bajo consumo
- Usar abetos reciclables (y llevarlos al punto de recogida de abetos en acabar las fiestas) y evitar el uso ornamental de plantas protegidas (musgo, muérdago, acebo)
- Decorar la casa con decoraciones de papel, troncos, hojas o elementos naturales, o material reciclado: 4 decoraciones de Navidad con papiroflexia
- Hacer un buen uso de los contenedores de reciclaje con todos los residuos que generamos durante las fiestas: papel, cartón, porexpan, plásticos, cristales…
- No tirar comida: podemos aprovechar los restos para el día siguiente o para congelar
- Evitar un exceso de embalajes: podemos usar bosas de tela, hacer fardos con sábanas viejas, reaprovechar cajas de cartón de zapatos o el papel de periódico para envolver los regalos
- Consumir comida de proximidad, ecológica y sostenible
- No usar papel de aluminio para cocinar ni conservar alimentos en la nevera: la mayoría de veces se puede sustitui por una fiambrera
Y si queréis, podéis descubrir más propuestas para una Navidad sostenible en estos enlaces:
- Navidad más sostenible – Diputación de Barcelona
- Navidad sostenible – Ayuntamiento de Barcelona
- Propuestas para una Navidad sostenible – Xarxa de voluntariat ambiental
8. Potenciar la participación infantil
Todas estas propuestas las podemos desarrollar en un clima de participación infantil. Los niños y niñas tienen derecho a participar en todos los aspectos de su vida y en las vacaciones, de manera más relajada, es un buen momento para ir introduciendo hábitos de participación en el entorno familiar. Esto lo podemos hacer de diferentes formas:
- Preguntando a los niños y niñas su opinión sobre las actividades familiares y las normas de convivencia
- Dejándolos escoger entre diversas opciones
- Favoreciendo que propongan ideas y participen en la decoración
- Animándolos para que colaboren a recoger y ordenar
- Proponiendo cargos rotatorios en relación con las tareas domésticas
- Invitándolos a que colaboren en la preparación de una actividad
- Dejando que propongan y argumenten normas de convivencia (a partir de 8 años), y las consecuencias de incumplirlas
- Animándolos para que propongan y organicen una excursión familiar (a partir de 8 años)
9. Fortalecer la imaginación y la creatividad
Empieza el invierno, hace más frío en la calle y oscurece antes. Por esta razón pasamos muchas horas en casa, que podemos aprovechar para despertar la creatividad y la imaginación en familia, dos ingredientes importantísimos para el desarrollo saludable de los niños/as. Aquí tenéis algunas ideas de actividades que podéis hacer en casa con los hijos e hijas: 21 ideas creativas (y educativas) para hacer con niños y niñas en casa
- Leer muchos cuentos
- Favorecer el juego simbólico dando tiempo y espacio necesario
- Inventarnos historias y teatralizarlas
- Montar un pequeño teatro de títeres o sombras chinas
- Construir una cabaña con cojines y telas
- Hacer talleres artísticos como: un taller de barro, pasta de sal, pinturas de dedos para los más pequeños, acuarelas, pinturas de cristales, mosaicos, scrapbooking, costura creativa, media o ganchillo…
- Cocinar en familia e inventarnos recetas divertidas
- Hacer experimentos científicos
- Escuchar música, cantar y bailar
10. Educar la solidaridad
Durante las fiestas de Navidad muchas entidades y asociaciones organizan actividades solidarias en las que podemos participar en familia; una campaña de recogida de juguetes o ropa, una campaña para que ningún niño o niña se quede sin actividades de tiempo libre, la gran recogida de alimenots, mercados solidarios, una campaña para que los Reyes Magos lleguen a todos los niños y niñas, puntos de recogida de juguetes, ferias de intercambio, campañas de comercio justo, cenas solidarias para la gente mayor…
Pero para ser solidario no hace falta participar en alguna de estas campañas de Navidad: podemos ser solidarios con los hermanos/as i amigos/as cuando necesiten nuestra ayuda, con los vecinos/as, con las personas que nos cruzamos por la calle cada día… solo tenemos que mirar alrededor nuestro y ver si con nuestras capacidades y habilidades podemos ayudar a las personas que nos rodean.
Si los niños y niñas se acostumbran y se impregnan de las actitudes solidarias de los adultos/as de referencia, tanto en la escuela como en casa en familia, podrán ir desarrollando ellos también estas actitudes y las incorporarán en su vida cotidiana el resto del año.
¡Para una Navidad, más que nunca, llena de magia, creatividad, valores y diversión!