Con la llegada del otoño y la vuelta a la escuela se acerca ese momento en el que preparamos una salida escolar para que los niños y niñas estén en contacto con la naturaleza y disfruten de la magia del otoño.

Una salida de un día a la naturaleza puede ser muy beneficiosa y saludable para los niños y niñas a todos los niveles, porque, tal y como explicábamos en nuestra entrada Colonias en la naturaleza como fuente de vida, una excursión fuera del ámbito escolar puede ayudar a contrarrestar el trastorno por déficit de naturaleza que pueden tener los niños/as y jóvenes más urbanitas.

Además, salir del entorno habitual de la escuela o el recreo nos ayuda a trabajar la cohesión de grupo, la convivencia, el compañerismo, el respeto, y nos permite experimentar sentimientos y emociones vinculados con la naturaleza.

Podemos hacer salidas escolares temáticas: de aventura, de historia, de ingenio, de artes escénicas,… pero en otoño es recomendable hacer una salida escolar ambiental.

Muchas escuelas eligen bosques caducifolios para hacer una salida de un día en otoño y así descubrir los ciclos anuales de la naturaleza, encontrar castañas y hojas secas de todos colores. Algunos de los bosques más visitados por las escuelas durante el otoño son la Fajedad’en Jordà o la Fageda de Santa Fe del Montseny.

Pero hoy os queremos hacer una propuesta de 5 lugares muy mágicos y desconocidos ideales para hacer una salida de otoño con los niños.

¿Venís con nosotros a descubrir los cambios de la naturaleza en otoño? Disfrutaremos de colores espectaculares, de rastros y cantos de animales difíciles de ver y de leyendas muy mágicas.

1. La vuelta a los Castaños

Esta salida está pensada para los cursos de Educación Infantil y Ciclo Inicial de Primaria. Se quiere aprovechar el entorno natural en el que nos encontramos para que los niños se impregnen de todo aquello que observan, que sienten, que oyen, que tocan… ¡Una experiencia mágica!

El recorrido se centrará en conocer de muy cerca árboles tan conocidos en nuestras tierras como son los castaños y las encinas. Aprovecharemos para que aprendan sus principales características, diferencias con otros árboles o los cambios que hacen en otoño, así como encontrar rastros de animales e identificarlos, plantas etc.

Esta salida la podemos hacer desde la casa de Colonias Can Massaguer, una de nuestras casas de colonias del Montseny.

2. El Puig de la Caritat

Desde Mas Cabàlies salimos por la pista que sube hasta arriba la colina de Can Roqueters. Allí, cogemos un sendero que sube serpenteando entre un pinar de pino silvestre húmedo, donde aparece algún roble y algún haya, que con su color intenso señalan el otoño.

A continuación, el pinar cada vez más húmedo da paso a un hayedo de árboles centenarios que se imponen en los bordes de nuestro sendero. Podemos disfrutar recogiendo hojas del suelo de diferentes tonos de marrón, naranja, amarillo y rojo, fijándonos en las formas de los troncos y las raíces, mirando el movimiento de las hojas que danzan todavía pegadas a las ramas más altas. Con suerte y si paramos la oreja, es fácil sentir el ruido característico del pájaro carpintero, que habita en estos bosques.

Saliendo del hayedo llegamos a los prados del Puig de la Caritat, prados de pasto típicos de la montaña media prepirenaica donde podemos disfrutar de las vacas pardas del Pirineo.

Desde el Puig, con preciosas vistas a la Vall d’Ogassa y Camprodon, bajamos por la pista hasta la villa de Ogassa. Desde allí, cruzando la riera de Malatosca, cogeremos un sendero que regresa a Mas Cabàlies.

3. El Gorg de Malatosca o de las brujas

Desde la carretera de Ogassa cogemos la Ruta del Hierro y del Carbón, que es la vía verde que une Ripoll con Sant Joan de les Abadesses y Montclar. Unos 200 metros más abajo encontramos un cruce donde la vía está empedrada. Aquí está el indicador de la poza y su camino que sale por la derecha. Seguimos el sendero que baja pronunciadamente haciendo zigzags hasta la poza (gorg).

Durante el camino el bosque es un pinar de pino silvestre con robleda, y aparecen fresnedas y avellanos en los lugares más húmedos y umbrías. En algunos puntos, encontraremos arces con las hojas de un color rojo intenso en otoño.

El Gorg de Malatosca está impregnado de leyendas e historias de brujas que reflejan la magia del lugar con un bosque de ribera exuberante de alisos y fresnos y un agua cristalina que brota con elegancia.

Durante esta salida podemos seguir los rastros de los jabalíes, ver algún esquirol o pinzón borronero si tenemos suerte e incluso, mirando el cielo a los claros de bosque, ver la vuelta imponente de algún buitre.

En otoño también podemos observar algún lucero, un pequeño pájaro que llega del norte de Europa y se instala en estos bosques para pasar el invierno.

Esta salida la podemos hacer desde la casa de colonias Mas Cabàlies, situada muy cerca del pueblo de Ogassa.

4. Descubrimos el Delta

El otoño es un buen momento para descubrir las aves que habitan los espacios naturales del Delta del Llobregat.

Un buen lugar para hacer observaciones son los espacios naturales del río de Cal Tet, junto a la desembocadura del Llobregat.

Comenzamos el itinerario por el camino de la Mota Alta, que nos conducirá a la marisma de Cal Nani, donde estos días podremos observar algún agrónomo blanco e incluso chivitas, aves migratorias que llegan hacia el otoño.

Observemos las aves en silencio, con algún prismático o larga-vista y dejémonos seducir por su belleza, por sus colores, sus formas majestuosas y sus movimientos armónicos.

El camino nos lleva hasta el Aguiat de Sabogal, lugar privilegiado con vistas al Estany de Cal Tet donde cerceta, cucharones y otros patos descansan y buscan alimento. Seguimos el camino hacia la torre de Cal Malet, y entre los cariños que bordean el camino podemos intentar descubrir el avetaro común, que se camufla a la perfección.

El camino de vuelta nos permite pasear por la orilla del río Llobregat, por donde podemos ver pasar aves en migración: algunas de vuelta a las tierras africanas como la cigüeña, y otras que llegan del norte de Europa, como las grullas, que vuelan en formación triangular y pueden detenerse a descansar en las aguas del Delta del Llobregat para después continuar su viaje hacia el sur de la Península Ibérica.

Esta excursión la podemos realizar en cualquier época del año desde Centro Recreo o desde algún punto de encuentro que acordamos con la escuela.

5. El puente de Malafogassa de la Riera Major

Salimos desde la casa de colonias Can Mateu subiendo hacia Vilanova de Sau y pasando por el bosque caducifolio de cerezos, fresnos y avellanos de la riera de romeros.

Después pasaremos por una zona más seca y mediterránea donde nos acompañarán los brezos y los madroños y finalmente, después de pasar por Can Valentí, el ambiente se vuelve más húmedo y vamos bajando por un pequeño valle donde aparecen robles y algunos castaños. Aquí, es fácil ver las huellas y rastros de jabalíes, corzos, zorros y jinetes.

Seguimos bajando hasta llegar a la «riera Mayor» y la bordeamos por la izquierda, sin cruzar el puente románico de Malafogassa. Entraremos así a un robledal mixto con fresnos, sauces y alisos a orillas de la rambla. Los días de otoño de temperaturas suaves y un poco encapotados, podemos encontrar alguna salamandra de colores sorprendentes escondida entre la hojarasca húmeda del robleda.

La merluza de agua o el martín pescador son otros habitantes comunes de la riera, así como el pico menor. Con suerte, podríamos ver la nutria, que utiliza estos ambientes para desplazarse entre las zonas más idóneas para su reproducción y como zonas de dispersión.

Esta excursión la podemos hacer desde todas nuestras casas de colonias de Vilanova de Sau: Can Mateu, La Cinglera, Els Porxos y El Company.

Actividades por realizar durante la excursión

¡Durante estas cinco salidas que proponemos, podéis sencillamente disfrutar del paseo con todos los sentidos alerta!

Pero además, podéis realizar actividades de descubrimiento naturalista adaptadas a la edad de los alumnos. El bosque de los sentidos, por ejemplo, es una actividad que proponemos para Educación Infantil, Ciclo Inicial y Ciclo Medio, pero también hay otros como el descubrimiento forestal o el anillamiento de ocelos que son específicos para Ciclo Superior, ESO y Bachillerato.

También, durante la salida podemos aprovechar para conectar con la naturaleza. Para inspiraros, podéis echar un vistazo al artículo Cómo celebrar el día mundial del medio ambiente o pensar en alguna actividad de Land Art (arte efímero en la naturaleza y con elementos naturales) como nuestra propuesta Arte Salvaje que se puede realizar a cualquier edad.

¡Esperamos que disfrute mucho de la naturaleza y el bosque este otoño!

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